Rebuscando por los cajones, lo encontré el otro día y tuve un sentimiento entre ternura por encontrarlo y pena por haberlo dejado en el olvido, tanto en mi cajón como en mi mente.
Estaba bordado y lo había dejado a la espera de ponerle una tela mona por detrás para que no se viera el revés del bordado, que mi revés la verdad no es nada bonito como para enseñarlo. Así que corté un trocito de tela, le puse un poco de entretela de doble cara. Corté los bordes con la tijera de zig zag y un pespunte a máquina.
2 comentarios:
Una monada Ana. Una idea muy buena lo de ponerle la tela por detrás.
Besos.
Lola.
Muy bonito
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